Todos los alimentos contienen tres categorías principales de nutrientes: proteínas, grasas y carbohidratos. El principal tipo de nutriente que afecta los niveles de azúcar en sangre (glucosa) son los carbohidratos.
Probablemente ya sepa que cuando se digieren, los carbohidratos se convierten en energía para el cuerpo o glucosa. Luego, la glucosa ingresa al torrente sanguíneo y hace que aumente el azúcar en sangre.
Esto suele suceder 15 minutos después de comer, según el tipo y la cantidad de comida. La insulina es necesaria para que el azúcar en forma de glucosa viaje desde el torrente sanguíneo hasta las células para obtener energía.
Dado que las personas con diabetes tipo 1 y, a veces, tipo 2 son insulinodependientes, es importante que conozcan la cantidad de carbohidratos en todos los alimentos y bebidas que consumen. Saber cómo contar los carbohidratos en los alimentos le ayuda a calcular la dosis de insulina que se administrará utilizando una jeringa de pluma o una bomba de insulina.
¿Qué alimentos contienen carbohidratos?
- Alimentos con almidón: panes, cereales, galletas saladas, arroz, pasta y cereales
- Verduras con almidón: papas, guisantes, frijoles y maíz
- Jugos de frutas y frutas
- Leche y yogur
- Dulces: miel, azúcar de mesa, almíbar, jaleas, caramelos, bebidas deportivas, galletas, tartas, pasteles, helados y budines.
Dos métodos para calcular los carbohidratos:
- Sistema de Unidades de Pan
La esencia de este método es presentar los productos alimenticios en forma de porciones, cada una de las cuales contiene 10 gramos de carbohidratos. Una porción que contiene 10 gramos de carbohidratos se llama unidad de pan (también conocida como unidad de almidón, unidad de carbohidratos, sustituto).
- Cálculo de la cantidad de carbohidratos
Este sistema implica pesar los productos y calcular la cantidad de carbohidratos en cada porción. Las principales herramientas para calcular los carbohidratos son las básculas de cocina, las etiquetas de los paquetes de alimentos, las tablas de calorías de los alimentos y los libros de recetas con menús semanales.
La nutrición para la diabetes mellitus, tanto de tipo 1 como de tipo 2, puede basarse en dietas especiales, muchas de las cuales han demostrado ser eficaces. Sin embargo, asegúrese de consultar con su médico o dietista antes de probar un nuevo plan de alimentación.
Alimentos con IG bajo
Algunas personas con diabetes descubren que una dieta de índice glucémico (IG) bajo puede ayudar a reducir los niveles de hemoglobina glucosilada.
Reemplazar los alimentos con IG alto por alimentos con IG bajo evita la liberación repentina de azúcar en el torrente sanguíneo después de una comida, lo que a su vez evita picos de azúcar en la sangre.
Alimentos con IG alto:
- Productos con melaza, miel y jarabe de maíz
- Productos de pan blanco y harina blanca
- Patatas, maíz y zanahorias
- Arroz blanco y pasta blanca
- Patatas fritas y palomitas de maíz
- Frutas dulces (por ejemplo, piña, melón, plátanos)
- Bebidas azucaradas, cerveza y la mayoría de licores.
Los alimentos con IG bajo se absorben más lentamente en el cuerpo y no provocan un aumento brusco del azúcar después de una comida. Alimentos con IG bajo:

- Todos los alimentos con edulcorantes (como aspartamo, fructosa y sacarina)
- Pan integral de centeno o harina de trigo
- Nueces, aceitunas y queso
- Vino tinto
Al elegir qué dieta formará la base de su dieta diaria, asegúrese de prestar atención a su equilibrio. El Servicio Nacional de Salud recomienda que aumente la cantidad de fibra en su dieta mientras disminuye la cantidad de grasa que consume (particularmente grasas saturadas).
Si bien esta recomendación se aplica principalmente a las personas con diabetes tipo 2 que luchan contra el sobrepeso, también será útil para las personas con diabetes tipo 1.