Tras el análisis detallado de las soluciones que oferta el mercado de software y aplicaciones, es común llegar a una conclusión: se necesita quien gestione y lleve a cabo un desarrollo de software a la medida; el problema es que ahora surge una nueva inquietud ¿qué es mejor, ejecutar el proyecto de forma interna o delegarlo en manos de un tercero? a continuación los argumentos válidos para tomar la decisión correcta.
Desarrollar software internamente vs delegarlo todo a un proveedor
¿Cómo definir si al momento de desarrollar el software conviene más el uso de los recursos de la compañía – existentes y/o incorporando más – o si por el contrario, conviene mejor contratar a un experto? esta es una inquietud bastante compleja de responder, el primer paso es entender qué implica cada uno.
Ventajas e inconvenientes de desarrollar internamente:
Evaluando en frío los puntos a favor de contar con un departamento propio de desarrollo sobresale la posibilidad de tener a disposición, un equipo funcional que tiene en su haber, conocimiento pleno acerca del negocio, lo que se traduce a la oportunidad de alinear dicha información con los objetivos del proyecto integrándose a la medida de lo que se necesite.

En contra, quizás el principal inconveniente llega al momento de formar el equipo de trabajo, y no se habla solo de los costes del anuncio necesario para encontrar los perfiles requeridos, sino también las dificultades a sortear hasta encontrar cada perfil. Por otro lado, no hay que olvidar las posibles reacciones frente a los cambios de carga de trabajo en la ejecución del proyecto.
Pros y contras de subcontratar:
Delegar los desarrollos a un proveedor tiene a priori la ventaja de abaratar costes, pero eso no es todo, pues se gana en flexibilidad al ofrecer la oportunidad de reaccionar de mejor manera ante las subidas y bajadas de trabajo, adicional a ser la opción más viable cuando lo que se busca es tiempo libre para enfocarse en ciertas áreas o actividades del negocio.
En contraparte, contratar un proveedor de desarrollo de software tiene la desventaja de perderse el control directo de todas las operaciones, adicional a los problemas acarreados por fallas en la comunicación o de priorización, sobre todo, cuando existe distancia considerable entre ambas partes – sea física o cultural – a lo que se le suman resultados inesperados cuando los requerimientos no están suficientemente cerrados.
¿Qué arroja el escenario actual de la industria de desarrollo?
No es un secreto, son drásticas las modificaciones que ha sufrido el área de desarrollo de software; de hecho, en los últimos años el cambio de paradigma vivido se acentúa con mayor fuerza al pasar de lenguajes tradicionales y metodologías de desarrollo orientadas a proyectos de largo plazo, a lenguajes complejos y especializados en el que las metodologías facilitan la fluidez de los resultados a las empresas a un ritmo avasallante.
Esto sin mencionar, el cambio de enfoque que, adoptado en la construcción de soluciones, dándole la prioridad a la experiencia de usuario en lugar de seguir el curso que antes llevaban en pro de alcanzar un único resultado.
Atendiendo a ello, la industria del desarrollo denota una disruptiva, compleja e innovadora evolución, haciéndose presentes importantes transformaciones en lo que concierne no solo a software sino a nivel de aplicaciones; entre las más resaltantes:
- Agilidad en la ejecución de los proyectos debido a metodologías de desarrollo de software capaces de reducir los ciclos de desarrollo
- Mayor sofisticación y potencia en lenguajes y ambientes de programación
- Tanto el diseño como el desarrollo, se ven afectados por la experiencia de usuarios
- Infraestructura montada en la nube o híbrido, es decir, una fusión entre la misma y el sitio
- Necesidad de que el software de adapte a los diversos sistemas operativos y dispositivos.
¿Qué conviene más desarrollar internamente o delegar a un tercero?
Indiferentemente del cliente o área que lo demande, por antonomasia, el desarrollo de software y Apps son proyectos cuya responsabilidad recae el departamento de tecnologías de información o sistemas, por lo que es ahí donde se encontrará la respuesta respecto a dichas áreas – o la organización entera – dispone de la capacitación, elementos y recursos suficientes con los que encarar el desafío que acarrea un desarrollo e implementación de software a la medida.
Desde la perspectiva de los expertos, el desarrollo de software desde el interior de la empresa es una práctica que va en picada, la mayoría, de inclina por el externalizar ¿Cuál es la razón? para empezar están los costes, no hay que ser muy diestro para entender lo encarecido que resultan los procesos de desarrollo interno – y no se habla solo de las metodologías necesarias para garantizar la calidad, sino la inversión en recurso humano calificado; pero eso no es todo, a ello se le suma la increíble penetración de soluciones informáticas World Class.
¿Pero qué pasa con las organizaciones que demandan requerimientos específicos al core de su negocio? simple, la solución radica en apostar por un modelo mixto, o lo que es igual, uno que implique un diseño de la mano de empresa – o en conjunto con desarrolladores externos – pero que sean estos últimos quienes se encarguen de su construcción y puesta en marcha.
¿Tercerizar es la clave?
Pese a que como quedó claro, tercerizar es un modelo que sugiere ventajas y desventajas, los profesionales del medio coinciden en lo conveniente que resulta – al menos en la mayoría de las veces – buscar la experticia de una empresa dedicada al desarrollo software, lo que no es de refutar considerando que será la que disponga del talento necesario para enfocarse en los retos propios de las nuevas tecnologías y tendencias amoldándolo en pro de las necesidades del usuario.
Encontrando el proveedor correcto, es más factible que el desarrollo de la estrategia digital triunfe, pues se estará de cara a un componente de innovación que internamente solo estaría siendo enfocado en el core de la compañía; adicional a los diferentes backgrounds, equipos especializados y conocimientos capaces de aportar visión e ideas distintas, un socio especializado en tecnología se traduce a contar con la mano amiga que puede aportar productos o soluciones en función de los requerimientos de la organización, ya que estará alineado con sus objetivos en la concepción y construcción de la estrategia que se materializará un experiencias digitales con las que sorprender al usuario final.
El enfoque de la compañía lo dice todo en el desarrollo de software
Retomando lo dicho anteriormente, no existe modelo que represente la fórmula exacta del éxito, es por ello que los especialistas también advierten que todo depende de lo que la compañía esté buscando, ya que hay ganancia a través de las dos opciones. Partiendo del enfoque de la compañía, por ejemplo, se verá mayor rendimiento en un software de mercado para la gestión de negocios, mientras que en la optimización de ciertos requerimientos, conviene apuntar a sumar desarrollos puntuales específicos.

El delegar el trabajo de desarrollo a un tercero con experiencia, se traduce a la posibilidad de enfocar el equipo a favor de la propia gestión del negocio u organización, lo que a su vez acarrear la potenciación de su ventaja competitiva en el mercado, en simultaneo que se apalanca la construcción de un desarrollo ajustado a los requerimientos sin interferir con sus operatividades.
Claro, para ello es indispensable que el proveedor sea dueño y galante del servicio de principio a fin, convirtiéndose en el eslabón capaz de brindar soluciones de calidad superior y alcanzando la culminación del desarrollo con profesionalmente y en menor tiempo.
¿Qué requiere la Organización para un exitoso desarrollo de software interno?
Si con todo lo antes expuesto, aun se tiene la convicción que lo mejor para la organización o empresa es apostar por un desarrollo de software interno, es imperioso que la misma esté preparada para asumir el reto, y no se trata únicamente de la importante inversión que sugiere la decisión, sino de procurar la minimización de los riesgos, de lo contrario arriesgará la posibilidad de generar una ventaja competitiva en su intento por satisfacer las necesidades del negocio mientras mantiene, crece y actualiza las aplicaciones.
¿Qué debe incluir el área responsable de un proyecto de desarrollo?
Es obvio que, desde su concepción, habrá de considerar el alcance de este, además de contar con experiencia en procesos de definición de perfiles, diseño, estimación, planeación, desarrollo, pruebas y seguimiento, por lo que ha de actuar de forma conjunta, con el área que lo demande.
Por otra parte – y suponiendo que se necesite la contratación de perfiles especializados – tendrá que disponer de un departamento con capacidad de proveer los servicios de atracción y retención de talento, es decir que tenga experiencia reclutando, entrevistando y midiendo las habilidades y aptitudes para cada vacante, después de todo, si hay una fase de gran impacto para el proyecto, es la selección e integración del equipo que trabajará en él, de ello depende que sea un existo, o una rotunda pérdida de tiempo y recursos para el negocio.