Por suerte, la reducción en el coste mensual de los seguros de salud privados los ha hecho accesibles a mucha gente, por lo que casi todos conocemos a alguien que tiene contratado un seguro de este tipo.
A la hora de encontrar seguros baratos, casi todos usamos Internet, en donde tenemos muchas páginas que nos sirven para encontrar los precios más baratos y los seguros que más se adaptan a nuestras necesidades.
Si bien Internet nos ha facilitado mucho la vida a la hora de contratar seguros baratos, la realidad es que tanta información nos abruma, ya que en muchas ocasiones no somos capaces de asimilarla, o no tenemos ganas de pasar horas y horas leyendo hasta la última letra de las pólizas.
Cuando contratamos un seguro de salud, tanto la aseguradora como el agente de seguros nos lo pintan todo muy bonito, pero la realidad no es así. Y es que basta con hacer una búsqueda en Google o pasarse por foros de seguros para ver las miles de quejas de los asegurados.
¿Qué podemos hacer para contratar el mejor seguro de salud?
Lo mejor es que preguntemos a la gente de nuestro entorno, tanto familiares, como amigos y conocidos, para ver qué seguro de salud tienen y sobre todo qué experiencia han tenido cuando han tenido que hacer uso de él.
No debemos olvidar que tras las aseguradoras hay personas, y que los médicos y enfermeras pueden atender mejor o peor. En todas las compañías habrá buenos y malos profesionales, y esto sólo lo podemos saber a través de la experiencia.
Por eso, lo mejor es preguntar a las personas que conozcamos y que tengan un seguro de salud, que nos podrán recomendar una compañía u otra en función de cómo los atienden. Puede ser que el seguro que nos recomienden no sea el más barato, pero de nada sirve contratar seguros baratos si luego la atención es pésima.
¿El seguro de vida cubre todas las muertes?
El seguro de vida se hace pensando en los familiares, ya que el titular no se va a beneficiar de sus coberturas. Este seguro se hace para que la familia reciba una cierta cantidad de dinero, que se pacta con la aseguradora, de manera que cuando muere el familiar, las personas que quedan no pasen ningún tipo de apuro económico.
Pero, ¿el seguro de vida cubre todo tipo de muertes? La respuesta, a pesar de que a alguno os cause sorpresa, es que no. Los seguros de vida tienen una única excepción, que es el suicidio. Ningún seguro de vida, sea de la compañía que sea indemniza a los familiares del fallecido si este se suicida.
Entender por qué los seguros tienen esta exclusión es muy fácil de comprender, y para ello voy a poner un ejemplo. Imaginemos por un momento a una persona que tiene una deuda de 200.000€, está desesperada y ha decidido quitarse la vida.
Esta persona puede ir a una compañía de seguros, y suscribir un seguro de vida por esa cantidad. En el momento en que se quitase la vida, su familia recibiría el dinero y podría eliminar esta deuda. Lo que os cuento puede parecer muy fuerte y muy duro, pero cuando las compañías de seguros de vida tienen esta excepción es porque lo que os cuento ha ocurrido.
Da igual si contratamos seguros baratos o seguros más caros, ya que nadie va a pagar a la familia si se demuestra que la muerte ha sido debida a un suicidio. ¿Por qué las compañías de seguros hacen esto? Puede parecer inhumano, pero lo hacen por pura supervivencia.
Hay que tener en cuenta que todos los años se suicidan miles de personas, y que nada les impediría dejar a su familia una buena suma de dinero, de forma que las compañías se arruinarían, ya que tendrían que pagar indemnizaciones millonarias mientras que los titulares aportan sólo unos cientos de euros.