Los parásitos internos pueden ser peligrosos no solo para la salud y la vida de los perros, sino también para los humanos y otros animales. Por ello, la desparasitación regular es una de las tareas más importantes del cuidador.
Desparasitación en un perro: ¿que vale la pena saber?
Desparasitar a un perro es una de las medidas preventivas más importantes (además de la vacunación contra enfermedades infecciosas). Los parásitos internos, es decir, nematodos, tenias y protozoos, tienen un impacto negativo en la salud y la vida de una mascota; pueden causar problemas digestivos, pérdida de cabello, diarrea e incluso dificultad para respirar. Por tanto, si notas parásitos en las heces o sospechas que tu perro puede haberse infectado, no te lo tomes a la ligera y acude al veterinario inmediatamente.
El régimen de desparasitación depende de la edad del animal, su estado de salud y si el producto se administra con fines preventivos o terapéuticos. Algunos veterinarios analizan las heces de perros adultos sanos en lugar de desparasitarlos de forma profiláctica.
Las mejores preparaciones veterinarias que se obtienen en las cirugías y clínicas de animales y en las buenas tiendas de mascotas funcionan mejor. Al hacer su elección, preste atención a las especies para las que está destinado el producto: no le dé a su perro un producto destinado a otros animales, por ejemplo, gatos, porque, en primer lugar, puede que no funcione y, en segundo lugar, puede ser perjudicial para él.
La dosis de la preparación depende del peso del perro. Si no está seguro de cuánto pesa su mascota, llévelo con usted a la clínica veterinaria. El veterinario lo pesará y le dará un medicamento en el proceso.
Algunas preparaciones funcionan no solo sobre los parásitos internos, sino también sobre los que se alimentan de la piel del animal, incluidas las pulgas y las garrapatas; y pregunte con qué frecuencia se debe usar la preparación; siguiendo siempre las instrucciones del médico.
Recuerda que algunos parásitos internos caninos que causan toxocarosis o giardiasis también pueden ser peligrosos para los humanos. Las enfermedades que se transmiten de animales a humanos se denominan zoonosis y requieren un tratamiento especializado, por lo que es mejor prevenir que curar.
Gusanos en un perro: ¿cómo reconocerlos?
Algunos parásitos, como las lombrices intestinales y las tenias, son visibles a simple vista en las heces de un perro. Gracias a esto, podrás reaccionar rápidamente y aplicar un tratamiento contra los parásitos internos. Sin embargo, la mayoría de los parásitos sólo son visibles al microscopio.
Los síntomas de infestación por parásitos internos no son específicos. Esto significa que pueden indicar muchas otras enfermedades. Uno de ellos es la pérdida de peso. La mascota come porciones más pequeñas de comida o incluso se niega a comer, o viceversa: pierde peso a pesar del aumento del apetito. Otros síntomas que suelen indicar que su perro está infectado con parásitos son letargo y letargo, diarrea con sangre, gases y vómitos.
La infección por nematodos puede causar dificultad para respirar y problemas respiratorios, ya que algunos de ellos atacan no solo el tracto digestivo sino también el tracto respiratorio inferior. También puede causar picazón.
En estos casos, es usual que los perros se rasquen intensamente, se froten contra diversos objetos, rueden e incluso se muerdan para aliviar la sensación de picazón y malestar.
El examen fecal es un método de diagnóstico eficaz en caso de sospecha de infestación parasitaria. Si la prueba es negativa, no es necesario desparasitar a su mascota. El tratamiento se utiliza solo en el caso de un resultado positivo de la prueba parasitológica fecal.
¿Con qué frecuencia debes desparasitar a tu perro?
La frecuencia con la que se administran antihelmínticos a un perro depende de varios factores:
- finalidad (administración profiláctica o curativa del fármaco)
- la edad del perro
- su estado de salud
- el estilo de vida de la mascota
Desparasitar al cachorro
Los cachorros son uno de los huéspedes más importantes de parásitos y contribuyen a la propagación de parásitos en el medio ambiente. Por ello, su desparasitación preventiva es muy importante.
La primera desparasitación debe tener lugar en la segunda semana de vida de los cachorros. La preparación debe darse a cada perro de la camada, así como a su madre. Gracias a esto, los perros no se contagian entre sí y se eliminarán eficazmente las posibles infestaciones de parásitos. El agente antiparasitario debe administrarse a los cachorros a las 4, 6, 8, 10, 12, 14 y 16 semanas de edad.
El calendario debe establecerse de tal manera que la administración de la preparación sea de 7 a 14 días antes de la vacunación protectora planificada contra enfermedades infecciosas. El veterinario te informará sobre las fechas recomendadas de desparasitación y vacunaciones para tu mascota durante la primera visita con tu perro.
Debido al alto riesgo de infestación de parásitos en animales jóvenes y al sistema inmunológico poco desarrollado, las pruebas de heces preventivas no son aplicables a los cachorros. Hasta el año de edad, las mascotas deben tratarse con antihelmínticos. Este es el único método eficaz de protección animal.
Después de este tiempo, puede llevar la muestra de heces de su mascota a un especialista para que la examine cada 3 a 6 meses, a menos que su veterinario decida lo contrario.
