Para poder tener bien controladas las finanzas familiares, es conveniente tener un presupuesto. Pero, ¿Cómo hacerlo?
Trucos para ahorrar
Hay que saber de qué se trata. Es un plan que ponemos por escrito en el que se determina el destino de cada euro que se gana. Hay que reflejar por un lado los ingresos de los que se disponen y por otro los gastos. Hay que intentar que sobre, todos los meses, es decir, hay que tener capacidad de ahorro y si es posible un poquito más cada mes.
Un presupuesto es imprescindible si queremos saber con detalle a dónde va a parar nuestro dinero, ese dinero que parece que vuela sin saber a dónde.
En el apartado de gastos deberemos hacer dos apartados bien diferenciados, por un lado los gastos fijos, es decir, los que sí o sí tienes que pagar, tales como vivienda, agua, luz, gas, alimentación, teléfono, etc. Todos los demás gastos no deben de incluirse ahí.
En el otro apartado, hay que incluir los caprichos como el cine, la televisión de pago, libros y cualquier otra cosa que no es necesaria para vivir.
Determinados todos los gastos, el presupuesto ya estará preparado. Una vez hecho esto, hay que ver si se puede reducir algún gasto fijo y con toda seguridad que el otro tipo de gastos sí que se pueden reducir.